En la actualidad se ha
puesto de moda un tema que en nuestro país apareció por vez primera en
1979.Cuyo primer congreso-reunión dio lugar a la publicación de un librito que
editaba la Asociación de Renta Básica (AREBA) llamado: “LA
CULTURA DEL TRABAJO,ABAJO”. Desde aquél entonces poco o nada han cambiado
en los argumentos para defender la citada renta. Bueno,quizás lo único
que ha cambiado es que ahora, el gran capital,Soros y compañía,sin ambages
están hablando de la renta básica universal como una posibilidad a futuro.Y
ello si que es preocupante,pues cuando el capital comienza a hablar, es porque
quiere integrarla en su seno. Porque si nadie se ha dado cuenta todavía,y aunque los grandes
popes, léase Marx y compañía,dijeron que el capitalismo se derrumbaría –sin
decir cuándo- ya llevamos varios siglos dónde una y otra vez y pese a las
repetidas crisis del sistema (y en eso
si acertaron) , éste se viene, una y
otra vez amoldándose a cada situación.Y no hemos sido capaces de derribarlo...¡
todavía , claro!
Quién no estaría de acuerdo
en reparar las injusticias de la sociedad actual.Nadie con una mínima sensibilidad,ya
sea de izquierdas (pocos muy pocos) , de la
falsa izquierda ,de la izquierda oficial o de la falsa progresía y demás ralea pseudo izquierdista
(PSOE,IU,Podemos) estarían en contra.
Pero el problema no es estar o no de acuerdo,sino preguntarnos para qué sirve y porqué ahora.
Se mantenía antes y se sigue
manteniendo ahora -entre los varios
elementos a tener en cuenta- que la
citada prestación descansa sobre la
universalidad (toca a todos sin mirar su capacidad adquisitiva) y es un
medio de redistribución de renta).
Y es aquí cuando comienzan
las dudas ¿Porqué hay que darle a los
ricos-que ya lo son- una renta por
minúscula que sea? ¿Que sentido tiene? ¿Es acaso un intento de hacernos
perdonar que les van a sacar más dinero
del que ahora pagan? ¿Estamos acaso intentando hacernos perdonar la osadía de
redistribuir la renta de las clases dominantes? O es que lo que queremos es que
esa medida no la vean como un acto revolucionario que rompa el satus quo y
ponga en peligro su dominación de clase; es como decirles algo así como: no se
preocupen que ahora, los pobres en vez
de poder sobrevir podrán inclusive hasta vivir.Que ustedes seguirán siendo los
que manden. Que las cosas no se maquillarán,porque como dice el refrán: aunque
la mona se vista de seda,mona se queda.No tiene sentido.
Y el otro gran elemento: la
redistribucuión de la renta .De tal forma que para conseguir el suficiente
dinero,hay que elevar la presión fiscal. Y es obvio que tocará a los que más
tienen.Porque poco van a sacar de aquellos que no tienen nada o muy poco.Dicho
de otra manera,es como si de la noche a la mañana se subieran los tipos de IRPF
y se quitaran las desgravaciones de Sociedades para que en vez de que las
empresas coticen -sobre todo las grandes- a tipos que no superan el 10,%
cotizaran al 25 ó 30%.
Y he aquí mi pregunta: ¿Si
eso se hiciera,cambiaría el sistema de base? Pues va a ser que no. Esa posición
lo único que haría es que los trabajadores dejaran de pensar en cambiar el
sistema.
En
este país hemos tenido un paro de mas de seis millones de personas y nadie ha
comprendido el porqué no ha explotado la revolución o algo que se le parezca .La
incredulidad era la moneda corriente. Nos echábamos las manos a la cabeza,pero
la revolución no comenzaba. La gente aceptaba su situación de pobreza y desigualdad
¿Alguien cree realmente que con dar una paga –exigua,pero paga- a todos los que ahora no cobrar prestación de
ningún tipo, va a hacerles reaccionar y que la revolución está a la vuelta de la
esquina? El conformismo se
instalará,mucho más que en la actualidad y ese conformismo y otras traiciones
hará que los trabajadores se olviden de algo por lo que deberían luchar: LA
OBTENCIÓN DEL PODER POLÍTICO.Porque si el poder político se consiguiera, si
hubiera una mayoría democrática elegida que no tuviese complejos y que se
atreviera a llevar a cabo un programa, programa, dentro de los cien primeros
días de gobierno (evidentemente tomando todas las cautelas posibles -antes y
durante- pues ya sabemos como las gasta el capitalismo ) ¿Lo sabemos? No haría falta la renta básica universal,
porque uno de los objetivos básicos del
gobierno de los trabajadores,sería una
reforma fiscal en profundidad,que no quedara en mera palabrería y arrancára
“legalmente”, como hacen ellos ahora, las cantidades necesaria para
redistribuir la riqueza.
Juan
Diego Hernández Valero
Abogado
