Desde la aparición de la sentencia del Supremo sobre el “procés”
ha habido opiniones para todos los gustos: desde quien la ve poca cosa hasta
quien la ve una barbaridad.Y sobre todo de los que se reputan de “izquierda” y
van con el marchamo de “progresistas”. Realmente son nacionalistas sin querer reconocerlo,pues entre otras
cosas,muchos de ellos sino hicieran esa transformación no serían nadie; nadie se fijaría en ellos. Es lo mismo que hacen
los comunistas, que ahora se llaman “comuns”. Siempre con una ambigüedad
calculada,no se les vaya a ver demasiado el plumero.
No voy a entrar a valorar la
respuesta del Supremo.De hecho soy de los que cree,que el aparato judicial
–puesto por los que ahora y antes lo han demonizado- es manifiestamente
mejorable,si los políticos de turno
quisieran.De hecho el factor fundamental,que nadie quiere reconocer,porque a
nadie interesa -dado que utilizan a ese aparato cuándo les conviene- es la poca formación de los Orgános Judiciales; de los
hombres y mujeres que son Jueces y Magistrados. Pues la gran mayoría de ellos
han conseguido serlo a base de memorizar
textos y textos (vulgarmente conocido como empollar) y se han “enseñado” a
fuerza de llevar casos y más casos. Y si hablamos del cuarto turno,pues apaga y
vámonos.Abogados que no llegaban a fin de mes y que se han podido meter como
Jueces. PERO A NADIE LE INTERESA EL
DISCUTIR SOBRE ESTE TEMA. Siempre es
más fácil tener a la justicia como rehén que ir al fondo del problema.Y así
echarles todas las culpas de lo que acontece en la sociedad civil. Tampoco nadie recuerda que las leyes que
aplican los Tribunales las confeccionan los partidos políticos,o como se dice
vulgarmente: el legislador. O lo que es lo mismo,la clase política.
Y eso,sencillamente eso es lo que ha
pasado con la sentencia del “procés”.Los políticos de turno,tanto de Cataluña
como del resto del España no han estado a la altura de lo que se entiende como un político serio.Y en vez de dimitir de sus puestos,y dedicarse
a sus asuntos privados han preferido echarle la culpa a otros (al aparato
judicial) para poder seguir,así medrando
y ganándose un salario que les haga llegar a fin de mes.Un salario que muchos de ellos tendrían dificultad en conseguir
en la esfera privada,manteniendo que
todo el problema se debe a la judicialización del “procés”.Y no es
cierto.EL “PROCÉS” LLEGÓ PORQUE LA CLASE
POLÍTICA,TANTO LA CATALANA COMO LA DEL RESTO DE ESPAÑA NO ESTUVO A LA ALTURA
QUE DEBÍA.Esquerra Republicana lo único que buscaba ,como se está
demostrando en la actualidad,era la hegemonía electoral en Cataluña, mientras
otros,Más y Convergèncía no admitían esa
posibilidad y la liaron por diverso motivos,entre otros ,tapar su corrupción.Pues
había que demostrar al mundo y sobre todo a los suyos,que a chulos no los
ganaba nadie.Y una y otra vez cualquier respuesta del contrario era contestada
con una propuesta más radical.Y ninguno se bajó del burro ,como se dice
coloquialmente. Mientras unos tuvieron la valentía de presentarse –al menos eso
hay que reconocérselo- otros huyeron descaradamente
sin dar la cara. Sin asumir sus responsabilidades .Aunque desde la cárcel siguieron con su relato y tampoco quisieron aceptar esa responsabilidad y se presentaron de nuevo a las elecciones.
Porque cuando hablamos de responsabilidad
política, estamos hablando de aquella responsabilidad que tiene alguien que
se dedica AL GOBIERNO DE LO PÚBLICO,PARA IMPLEMENTAR
SOLUCIONES A LOS PROBLEMAS COTIDIANOS DE LOS CIUDADANOS. En Cataluña y en el resto de España tenemos
ese grave problema. A los políticos de turno se les llena la boca sobre
exigir a los demás responsabilidades políticas y raramente ellos mismos se la
aplican.Y eso es lo que ha pasado con el “procés”.Una y otra vez el relato de
esa clase política era y es,que se quería arreglar el “problema” que dicen ellos,a través de los Juzgados.Pero ninguno reconoce que no se arregla el
supuesto conflicto,del todo artificial y provocado, porque ellos no están a la
altura de las circunstancias.PORQUE
NO SABEN DAR SOLUCIONES A LOS PROBLEMAS QUE SE PLANTEAN EN LA SOCIEDAD Y POR
ESO UNA Y OTRA VEZ SE ENROCAN EN SUS POSICIONES. Y así, con la ayuda de los
medios de comunicación públicos y
privados (¡todos ellos alimentados con
dinero público! ) han conseguido que cale en una parte importante de la
población, que la razón es suya.
El problema de esas responsabilidades
es que sólo hay una forma de ejercerla : DIMITIR
DEL CARGO y NO PRESENTARSE A LAS ELECCIONES DURANTE UN TIEMPO. Y por eso una y otra vez repiten
con asiduidad que se ha judicializado la política,PARA ASÍ NO TENER QUE RECONOCER QUE EL PROBLEMA NO ES LA
JUDICIALIZACIÓN SINO LA POCA CAPACIDAD QUE TIENEN DE SER POLÍTICOS. A lo
más que llegan , es a enunciar que tal o cual sabrá ejercer esa responsabilidad
política.Pero sólo se queda en eso,en
una declamación más. Sin llegar
prácticamente nunca a ejercerla de forma
real dimitiendo del cargo.
Por desgracia en este país no tenemos
políticos sino gente que vive de la política.
Juan
Diego Hernández Valero
Abogado